Al remezón producido en el Jurado de Nacional de Elecciones (JNE), por la declinación de Luis Arce Córdova, se suma otro polémico hecho. Un día antes de la segunda vuelta, observadores internacionales supuestamente imparciales bebieron licor y comieron a sus anchas en el domicilio de otro miembro: Jorge Rodríguez Vélez. Los entonces invitados luego emitieron pronunciamiento negando irregularidades en los comicios.
“Aquí estamos en la difícil tarea de la observación internacional. No es fácil”, dice uno de los protagonistas de un video grabado en el comedor del representante de las universidades privadas ante el máximo organismo electoral.
Otro, identificado como José Thompson, muestra alegremente sus botellas de pisco: “Sacrificándonos profundamente. Esto no es para cualquiera”.
Finalmente, el mayor de los observadores, quien sería de Uruguay, muestra aparentes efectos del licor, y empieza a hablar en forma entrecortada, diciendo “Realmente preocupados, con alcohol por fuera y tratando de… también por dentro”.
EXPRESO se comunicó con Rodríguez Vélez, quien confirmó la reunión, y dijo que Jorge Salas Arenas, titular del JNE, le había pedido explicaciones por escrito.