Los mineros ilegales siguen operando a espaldas de la ley y burlan las inspecciones de la Gerencia Regional de Energía y Minas e Hidrocarburos de La Libertad que ejecuta para frenar a esta ilícita actividad en el convulsionado cerro El Toro, Huamachuco, en la provincia de Sánchez Carrión.
Precisamente, hace una semana, el ente regional hizo inspecciones en las labores ilegales que pertenecerían a los hermanos García y Nontol, en esta zona andina. Cuando llegaron los inspectores hallaron algunos indicios de actividad minera, pero no encontraron a nadie. La salida intempestiva de algunos ilegales se habría generado tras la alerta de la fiscalización, por lo que se encargaron de despejar el área para no dejar rastro.
Sin embargo, mientras los funcionarios realizaban las diligencias en estas operaciones mineras, a unos metros, en la labor ilegal de los Sánchez Ballena extraían el mineral de forma ilegal. Los pobladores de este lugar lamentaron la total descoordinación de la Gerencia Regional de Minas al momento de realizar las inspecciones.
A través de imágenes, los comuneros denunciaron cómo operan las mafias en esas labores, siguen robando mineral ante la vista de la Policía y las autoridades. En las imágenes se observa a personal trabajar en condiciones inseguras, sin implementos de seguridad, cargan sacos en camiones, remueven el material de relave minero causando irreparables daños a los sembríos y al medioambiente. Nada los detiene, ya que estarían siendo alertados de las intervenciones.
Menores son explotados
Para agravar la situación, los que dirigen esta actividad ilegal no tienen ningún reparo en contratar a menores de edad, que son explotados laboralmente y ponen en riesgo sus vidas al ingresar en tugurizados y oscuros socavones a cambio de 20 soles diarios.
Esto quedó en evidencia luego que, hace unos días, la señora Santana Tambo López, denunció que su hijo de 15 años desapareció tras salir a trabajar en un socavón ilegal del caserío de Shiracmaca. El menor estuvo cuatro días desaparecido y luego apareció en Quiruvilca (Santiago de Chuco) trabajando en otra mina informal.
Como sucede con la mayoría de pobladores de Shiracmaca es normal que sus hijos trabajen en los socavones ilegales. Los pobladores lamentaron que esto se debería a que los dirigentes de la zona respaldan a los ilegales. Pese a ello, algunos lugareños pidieron la intervención de las autoridades, pero la Policía y el fiscal de Huamachuco han hecho lo de siempre. Quedarse de brazos cruzados, como sucedió con los niños que murieron por la explosión de una dinamita y con los cuatro fallecidos en el socavón de Minerals Doña Julia.
“Si se trata de minería ilegal, policías y fiscales miran para otro lado. Se justifican capturando a sujetos con armas y explosivos. Pero jamás a quienes cargan y llevan mineral robado. Ni una sola investigación al respecto, ni de los fallecidos en estas labores”, cuestionaron.
A pesar de las pruebas que ponen en evidencia la impunidad con la que operan los mineros ilegales a escasos metros de las viviendas, un grupo de personas denunciadas por minería ilegal niegan dedicarse a estas labores ilícitas. Son cerca de 31 personas que fueron notificadas mediante resolución de la Gerencia Regional de Energía y Minas e Hidrocarburos de La Libertad para paralizar de forma inmediata sus actividades extractivas ilegales.
Por su parte, el profesor Mario Vargas Vera, nombrado hace unos días como nuevo subprefecto de Sánchez Carrión, se comprometió a buscar solución a la problemática de la minería ilegal en esta provincia andina.
“Sin reparo del tiempo, pretendemos coadyuvar a la búsqueda de la solución de los problemas más álgidos de nuestra provincia. La minería ilegal es un tema social bastante crítico. Se tendrá que valorar el derecho a la defensa de la vida y del medioambiente. Las instituciones pertinentes tendrán que intervenir a fin que se llegue a una solución y permita la buena convivencia», sostuvo.