Una Mesa Técnica de Trabajo, llevada a cabo en el auditorio de Sedalib, tuvo como objetivo principal explicar y clarificar la urgente necesidad de implementar soluciones definitivas para evitar el continuo daño ambiental a los totorales de la zona.
Juan Mimbela León, Subgerente de Aguas Residuales de Sedalib, indicó que paradójicamente, mientras Huanchaco sufre los desbordes, existen 16 mil hectáreas de zona árida al norte de Trujillo que no pueden ser desarrolladas por falta de agua.
Mimbela resaltó el potencial de utilizar las aguas residuales tratadas de alta calidad para regar estas áreas. «Se tiene que proyectar la puesta en valor de zonas áridas con fines turísticos. «Tenemos al Rededor de 7,000 M3/Día de agua de alta calidad lista para el riego. La calidad microbiológica y fisicoquímica de las aguas residuales tratadas permite su reúso que podría hacer florecer esas zonas áridas», afirmó.
En este sentido, Sedalib está coordinando con la Gerencia de Medio Ambiente de la Municipalidad de Huanchaco la firma de un convenio que permitirá usar agua tratada con calidad de agua de riego para regar calles sin pavimento, veredas y jardines del distrito como las lomas de Huanchaco y Huanchaquito. Sedalib tiene habilitadas 02 cisternas de 34 M3, que transportará las aguas residuales para regar las zonas áridas.
Por su parte, Kathy Negrón Túnjar, Jefa de la SUNASS, hizo un llamado enfatizando la responsabilidad de los gobiernos locales en la solución de esta problemática.
Cabe resaltar que las aguas residuales tratadas son preparadas especialmente para este fin, y que se encuentran fuera de la línea de tratamiento convencional, almacenada bajo condiciones especiales para el reúso.
A la reunión asistieron representantes de Sedalib, Sunass, la Gerencia Regional del Ambiente, la Municipalidad de Huanchaquito y la Gerencia de Medio Ambiente de Huanchaco.